Bienestar emocional en el trabajo: qué es y cómo fomentarlo

Si hablamos de productividad y retención del talento, las empresas que promueven el bienestar emocional en el trabajo llevan la delantera. Fomentar el cuidado de la salud mental, y no solo la física, contribuye a cohesionar equipos, motivar y generar un mejor ambiente. Por lo tanto, este aspecto es la base sobre la que gira toda compañía que desee evitar dinámicas tóxicas. Otras consecuencias negativas son altas tasas de absentismo y rotación de personal. Te contamos todo sobre esta cuestión.

¿Qué es el bienestar emocional laboral y cuál es su importancia?

Es, a grandes rasgos, un estado mental saludable. El trabajador dispone de las herramientas psicológicas suficientes para hacer frente a, por ejemplo, momentos de tristeza y pesimismo o a síntomas de ansiedad.

La jornada intensiva, la depresión postvacacional o cualquier otra coyuntura puede poner en riesgo la estabilidad emocional del trabajador. Eso puede conducir a estrés laboral y síntomas negativos muy variados. Al final, está en juego el buen funcionamiento de todo el engranaje de recursos humanos. Porque si fallan los eslabones, la cadena se tensa, con el consiguiente riesgo de romperse.

De ahí la importancia de cuidar el bienestar emocional en el ámbito laboral. Es la clave para que los empleados tengan la suficiente capacidad para mantenerse positivos y gestionar adecuadamente sus emociones.

Esto no quiere decir que se encuentren en un estado de felicidad continua, pero sí que puedan experimentar satisfacción en el trabajo. Y cuando haya momentos de cierta presión, negativos o se enfrenten a dificultades, sepan reaccionar de manera proactiva.

Principales emociones negativas en el trabajo

En el trabajo pueden surgir emociones negativas, tales como:

• Ansiedad.
• Estrés.
• Sensación de inseguridad o falta de reconocimiento.
• Falta de motivación.

Cuando aparecen, se manejan mucho mejor si la persona goza de buena salud mental y emocional. Así, la relevancia de esta cuestión radica en varios aspectos, entre los que están:

• Buen ambiente laboral.
• Productividad.
• Retención del talento.
• Captación de talento.
• Promoción y prevención de la salud de los empleados.
• Cohesión de equipos y fomento de la cultura organizacional.

Uno de los objetivos de tu empresa debería consistir en lograr que los trabajadores se doten de apropiadas herramientas psicológicas y emocionales. De tal modo, podrán gestionar sus preocupaciones sin que eso repercuta negativamente en el resto de la plantilla, desde responsables de departamentos a sus propios compañeros.

4 medidas para fomentar el bienestar emocional en las empresas

Una cultura preventiva resulta básica cuando hablamos de la seguridad y salud de cualquier organización. Respecto a esta cuestión en concreto, se trata de implantar medidas que eviten el deterioro emocional de los empleados. Estas son algunas de las más efectivas.

Implantar medidas de conciliación de la vida laboral y familiar

Fomentar políticas que permitan a los empleados desconectar del trabajo fuera de horario, promover flexibilidad en la jornada laboral y respetar el tiempo libre contribuyen al bienestar emocional.

Promover una comunicación honesta y transparente

Las relaciones que se caracterizan por la claridad y un deseo genuino de llegar a acuerdos son las más saludables. Todo esto ayuda a crear un ambiente positivo y seguro, que afecta favorablemente en los planos físico, mental y social.

A eso hay que añadir respeto, asertividad y actitud activa y participativa. Con ello se genera confianza, que es la base para todo tipo de relaciones y entre ellas las del entorno laboral.

Apoyar el desarrollo profesional y personal

El empoderamiento de los empleados y su sensación de bienestar en el trabajo se logra, entre otras cosas, apoyando su formación y capacitación. Cuando las personas trabajadoras ven que avanzan en su desarrollo profesional y personal se sienten más integradas.

Esto no quiere decir que haya que ascender de puesto a todos los empleados para que se sientan mejor. Significa que sentir reconocimiento, apoyo para mejorar y darse cuenta de que adquieren nuevas habilidades y capacidades fortalece su salud emocional.

Plantear medidas para reconocer y agradecer la labor de los empleados

En la línea del punto anterior, implantar distinciones o reconocimientos anuales es una buena forma de hacer que los trabajadores se sientan reconocidos. Hay otras estrategias para conseguirlo, entre las que se encuentran las siguientes:

• Ofrecer ascenso de puesto o incremento de salario.
• Otorgar reconocimientos en actos corporativos.
• Destacar su labor en actos públicos o institucionales.
• Enviar correos electrónicos de agradecimiento o valoración positiva.
• Crear un plan de incentivos empresarial.
• Poner en marcha un plan de acción social con medidas de conciliación y otras ventajas, tanto en especie como en metálico.
• Organizar actividades en equipo o deportivas en la empresa.

Para muchas empresas, este tipo de acciones resultan secundarias. Sin embargo, si realmente desean establecer una cultura organizacional sólida y un sentimiento de pertenencia en la plantilla, es recomendable que las tomen en serio. Cuando se priorizan medidas de aseguramiento del bienestar emocional en el trabajo, se cosechan beneficios de múltiples tipos. Entre ellos están los relativos a la productividad, a la retención del talento y de la mejora del ambiente y la cohesión de los equipos.